La ministra de Alimentación, Agricultura y Pesca de Islandia, Svandís Svavarsdóttir, ha tomado la decisión de suspender la temporada de caza de ballenas hasta el 31 de agosto.
Esta medida se ha tomado como respuesta a los informes que revelan que estas capturas no se ajustan a la actual legislación de bienestar animal.
La Autoridad Alimentaria y Veterinaria presentó un informe en mayo de 2023, el cual concluyó que las técnicas utilizadas y la duración de la caza de rorcuales comunes no cumplen con los estándares establecidos para proteger a estas especies.
Hasta este año, Islandia permitía la caza legal de hasta 500 ejemplares de rorcuales comunes y rorcuales aliblancos (ballenas minke). Sin embargo, tras la publicación del informe, se encargó al Consejo Asesor de Expertos en Bienestar Animal evaluar si esta caza cumplía con los requisitos de la Ley de Bienestar Animal. El dictamen presentado al Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca el 19 de junio confirmó que el método utilizado en la caza de grandes ballenas no se ajustaba a esta legislación.
Además de los motivos relacionados con la protección del medio ambiente y de los cetáceos, la ministra Svandís Svavarsdóttir había mencionado en febrero de 2022 la falta de rentabilidad económica como una razón para considerar el fin de la caza de ballenas en Islandia. Con base en la conclusión del Consejo Asesor de Expertos en Bienestar Animal, el Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca ha decidido suspender todas las operaciones de caza de ballenas. La ministra enfatiza la obligatoriedad de cumplir con los estándares mínimos de bienestar animal establecidos por la Ley, y menciona la necesidad de examinar si es posible establecer reglas que garanticen el cumplimiento de estos requisitos.
Esta suspensión temporal proporcionará tiempo para revisar posibles mejoras y ajustes legales que limiten aún más la caza de ballenas en base a la Ley de Bienestar Animal y la Ley de Caza de Ballenas. El Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca está en contacto con científicos especializados y las empresas involucradas para explorar estas opciones. Es evidente que Islandia está tomando medidas para garantizar el cumplimiento de las leyes de bienestar animal y proteger la vida marina en sus aguas.
