El rey Felipe VI se prepara para enfrentar el desafío de elegir entre los dos candidatos para encargar la formación de un nuevo gobierno. La ronda de consultas, que comenzará el lunes, marcará la novena ocasión en la que el rey desempeñará este papel crucial.

En medio de un clima político complejo, tanto Sánchez como Feijóo están lejos de asegurarse los apoyos necesarios para conformar un gobierno. A pesar de la reciente constitución de las Cortes, que favoreció a los socialistas con la elección de Francina Armengol como presidenta de la Mesa del Congreso mediante una mayoría absoluta, el camino hacia la investidura sigue siendo incierto.
La ronda de consultas se llevará a cabo durante dos días, con la participación de varios partidos políticos. ERC, Junts, Bildu y BNG han declinado la invitación a las consultas, mientras que UPN, Coalición Canaria, PNV, Sumar, Vox, PSOE y PP asistirán a la cita.
El rey recibirá a los representantes de los partidos a lo largo de los dos días. Javier Esparza de UPN, Cristina Valido de CC, Aitor Esteban del PNV y Yolanda Díaz de Sumar serán algunos de los primeros en presentarse. El martes, el presidente de Vox, Santiago Abascal, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y Núñez Feijóo cerrarán la ronda de consultas.
Las negociaciones entre los partidos continúan en un intento de buscar las mayorías necesarias para formar gobierno. La relación de fuerzas entre los socialistas y los populares está ajustada, lo que hace que la elección del candidato adecuado para la investidura sea un desafío importante para el rey.
Alberto Núñez Feijóo no ha descartado la posibilidad de la investidura y ha expresado su disposición a asumirla si así lo ordena el rey. Mientras tanto, desde el PSOE, el ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, ha cuestionado la insistencia de Feijóo en buscar la investidura y ha planteado que su elección sería una pérdida de tiempo.
La influencia de los partidos nacionalistas en la decisión final no puede ser subestimada. La ardua formación de la Mesa del Congreso ha dejado claro que para Sánchez mantenerse en la Moncloa dependerá una vez más de asegurar el apoyo de estos partidos.
A medida que se acerca la investidura, las conversaciones y negociaciones entre los partidos continuarán. El proceso de formación de gobierno será un verdadero desafío y una prueba para el rey, quien debe tomar una decisión en un escenario político complicado y fluido. A pesar de los desafíos, tanto Pedro Sánchez como Alberto Núñez Feijóo están luchando por ganar el apoyo necesario para liderar el país en los próximos tiempos.