Carles Puigdemont retoma su protagonismo político al establecer las condiciones para la investidura de Pedro Sánchez. Puigdemont, líder de Junts per Catalunya, ha programado una conferencia en Bruselas para exponer las demandas que su partido plantea en las negociaciones con el PSOE.

El enfoque de estas conversaciones se centra en la posible investidura del presidente español y marca el inicio oficial de un proceso que ya ha tenido avances notables.
Puigdemont, quien durante años fue excluido y enfrentó criminalización, se perfila nuevamente como un interlocutor político válido para los principales partidos a nivel estatal. Los resultados de las recientes elecciones generales han posicionado a los 7 diputados de Junts en una posición clave para influir en la investidura de Sánchez. La conferencia en Bruselas es un paso adicional hacia la validación de Puigdemont como líder político, incluso sin ocupar un cargo orgánico en su partido.
En un encuentro anterior con la vicepresidenta española y líder de Sumar, Yolanda Díaz, Puigdemont demostró su intención de jugar un papel integral en la negociación para la investidura. Este encuentro marca un hito, ya que es la primera reunión de Puigdemont con un miembro del Gobierno español desde su instalación en Bélgica en 2017.
Las condiciones que Puigdemont anunciará para las negociaciones aún no se han revelado, pero se espera que incluyan demandas como amnistía para los represaliados del Procés y un referéndum de autodeterminación para Catalunya. Aunque la amnistía podría ser alcanzable, el referéndum plantea un conflicto con los socialistas.
La relación entre Junts y ERC también es un factor en juego, con ambos partidos compartiendo objetivos similares. Sin embargo, Puigdemont aspira a demostrar que Junts puede lograr avances más significativos para el independentismo que ERC. La pugna entre estos dos partidos continúa, y el control de daños respecto al independentismo civil es esencial para minimizar los efectos de cualquier acuerdo con el PSOE.
El proceso de negociación se vislumbra largo y complicado, y la fecha tope para llegar a un acuerdo es el 27 de noviembre. Mientras tanto, los eventos como la celebración del 11 de septiembre y el sexto aniversario del 1-O intensifican la movilización de las bases independentistas.
En resumen, Carles Puigdemont retoma su influencia política al establecer condiciones para la investidura de Pedro Sánchez. Su conferencia en Bruselas y su encuentro con Yolanda Díaz marcan pasos clave en la negociación entre Junts per Catalunya y el PSOE. Aunque las demandas específicas aún no se han revelado, Puigdemont busca validar su posición como líder político y demostrar que puede lograr avances para el independentismo. La dinámica entre Junts y ERC también es un factor a tener en cuenta mientras se avanza en este proceso de negociación complejo.