Estados Unidos ha emprendido una acción legal sin precedentes contra el gigante del comercio electrónico Amazon
La Comisión Federal de Comercio (FTC), el organismo regulador líder en el país, ha anunciado la presentación de una demanda que acusa a Amazon de ejercer un monopolio y de utilizar su influencia para distorsionar el comercio electrónico en Internet.
La FTC ha interpuesto la demanda en la Corte de Distrito del estado de Washington, con el respaldo de los fiscales generales de 17 estados, incluyendo dos republicanos. La acusación central de la Comisión es que Amazon emplea una serie de tácticas anticompetitivas y desleales para mantener ilegalmente su posición de monopolio, y una de las principales tácticas señaladas es la presión sobre los vendedores para que no reduzcan sus precios.
La acción legal representada por la FTC es la medida más enérgica tomada hasta la fecha por la administración de Joe Biden y su presidenta, Linda Khan, quien ha sido crítica con Amazon durante mucho tiempo. Previamente, la FTC había acusado a la compañía de no eliminar los datos recopilados por su asistente virtual Alexa sobre niños, de monitorear de manera ilegal a los usuarios de sus dispositivos Ring y de usar tácticas engañosas para atraer a los clientes a suscribirse a Amazon Prime.
La demanda podría tener un alcance significativo, afectando a más de cien millones de compradores y generando pérdidas económicas por miles de millones de dólares. Entre las prácticas cuestionadas se encuentra la presunta penalización de los vendedores que ofrecen precios más bajos mediante los algoritmos de búsqueda de Amazon.
La acción legal de la FTC marca un hito en el enfrentamiento entre las autoridades de Estados Unidos y Amazon, y plantea interrogantes importantes sobre el futuro del comercio electrónico y la competencia en línea en el país. A medida que el caso avance, se seguirán desarrollando eventos clave en esta batalla legal que podría tener un impacto duradero en la industria.
