Isabel Díaz Ayuso impulsará una nueva ley para gestionar el impuesto a las grandes fortunas y devolvérselo a los contribuyentes madrileños. El tribunal rechazó el recurso interpuesto por el Gobierno autonómico, avalando así la legalidad del impuesto a las grandes fortunas.

Ayuso ha reaccionado de manera inmediata ante esta situación y ha anunciado la tramitación urgente de una norma propia que permita a la Comunidad de Madrid gestionar y recaudar este impuesto. La presidenta autonómica declaró: «No vamos a quedarnos parados». Su objetivo es que la recaudación quede en manos de los contribuyentes madrileños y, de esta manera, se les pueda devolver el dinero.
La propuesta de la Comunidad de Madrid consiste en recuperar el impuesto a las grandes fortunas en la región, aplicando este gravamen a quienes posean un patrimonio superior a los 3 millones de euros, que es el límite establecido por el Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas del Estado. Esto significa que los contribuyentes madrileños que debían pagar este impuesto estatal lo harán a través del Impuesto sobre el Patrimonio autonómico. La recaudación se destinará a las arcas de la Comunidad de Madrid, con el objetivo de reinvertirla, principalmente a través de la reducción de impuestos.
La presidenta Ayuso ha enfatizado que la intención es recaudar este impuesto para que el dinero beneficie a la región. Según ella, el impuesto a los ricos plantea un riesgo para el crecimiento económico, la prosperidad y la atracción de inversiones en la Comunidad de Madrid. La región ya había intentado anular esta medida previamente, primero con un recurso ante el Tribunal Constitucional y luego con la deducción fiscal del 20% para inversores extranjeros, como un contrapeso.
La Consejería de Economía y Hacienda calcula que la medida del Gobierno de Sánchez podría provocar una disminución de la inversión de hasta 1.200 millones de euros en Madrid. Ayuso sostiene que este impuesto afecta negativamente al patrimonio, el trabajo y el esfuerzo de los contribuyentes madrileños.
La presidenta de la Comunidad de Madrid también ha expresado su sorpresa por la falta de autonomía fiscal que se otorga a algunas comunidades autónomas, mientras que Madrid parece estar limitada en su capacidad de definir su propia fiscalidad. Además, destaca que el impuesto a los ricos ha generado un rechazo generalizado entre los gobiernos regionales del Partido Popular.
En resumen, Isabel Díaz Ayuso impulsará una nueva ley para gestionar el impuesto a las grandes fortunas y devolver el dinero recaudado a los contribuyentes madrileños, como respuesta al fallo del Tribunal Constitucional sobre este tributo estatal.